22 de mayo de 2012

ODA AL PENE





Una muestra en París analiza las representaciones positivas del órgano viril. El Parapoeta se hace eco de la noticia y la describe en versos rimados:

Los parisinos siempre han sido muy sexuales,
no es de extrañar, por tanto, esta muestra del órgano viril;
eso sí, en positivo y mostrando sus bondades naturales
erotismo sano, masculino, y, por qué nó, sutil.

Corresponde esta acertada afirmación
a Bárbara Polla, comisaria de la exposición
cuyo nombre y apellido está muy en consonancia
con los falos aquí mostrados en abundancia.

A Camilla, la poetisa de la virilidad,
al observar un contorno sexual
tan grande y tan bestial
le entra inquietud por su profundidad.

“Penes bellos”, la exposición
surgió del estudio del cuerpo y de una reflexión:
Los hombres han representado el miembro femenino con pasión
pero las mujeres, al pene artístico, no le han prestado mucha atención.
Además, matiza con precisión:
No se trata tanto de la belleza del órgano en cuestión,
sino de la creatividad artística de su representación.

Siempre, al pene se le ha representado
como algo agresivo y violento, y no se ha considerado
su aspecto artístico, erótico, poético: La galerista ha matizado.
Así es que la obra de doce artistas he rescatado
que al miembro viril su mala imagen han lavado.

Miembros en reposo y en actividad hay en esta exposición:
Unos atrapados en botellas de cristal,
otros rodeados de un aura sin igual,
unos son comestibles y otros suenan con discreción;
y en la celebración de la inauguración:
Cerveza y plátanos, que producen fálica evocación.

 La religión también tiene su perspectiva
y  penes como menhires tienen su representación;
un órgano masculino tiene una nota explicativa
“danos tu juego cotidiano” ¿reivindicación?
y también hay un puño con el dedo pulgar en erección
en una evidente y sexual connotación.

Este trabajo busca confrontar de igual a igual,
dice la artista emocionada,
mujer y hombre, vagina y pene terrenal y espiritual
en territorio abierto y en una relación igualada.