Nuestra falsa
democracia
es una corrupta
partidocracia;
tal como está
estructurada
con sus leyes
astutamente elaboradas
para el beneficio de
la partidocasta colocada
y por capitalistas y
banqueros dominada.
Es una fábrica de
chorizos muy potente
de alto vuelo y alto
postín
cuya sinvergonzonería
no parece tener fin
pero poco a poco,
cada vez más gente:
La pueblerinía y la
ciudadanía
el proletariado y la
burguesía
es decir, los
sufridos trabajadores,
los parados, víctimas
de tales opresores
los jubilados,
nuestros mayores
y hasta los jóvenes e
infantes
todos, algo después o
algo antes
se da cuenta de lo
que es evidente:
Somos y hemos sido
engañados,
a la vez que
estafados
y de una u otra
manera robados
y solamente en la
casta hay un objetivo
que es el más
imperativo
y que es de absoluta
prioridad
por encima del bien
de la nación y de la sociedad:
Que cada cuatro años
les votemos
pues "es un derecho y
un deber que tenemos"
y así no pierden sus
poltronas y prebendas
sus privilegios y
múltiples haciendas
y sus múltiples
dineros
pues cobran hasta por
respirar
sus cuentas ganan
muchos enteros
y se multiplican sin
parar
en paraísos fiscales
ellos son del todo
internacionales.
Pero ¡basta ya!, todo
tiene una línea roja
si siguen tensando la
cuerda, esta se rompe, no se afloja
nosotros somos muchos
más y cabreados
y como cada vez hay
más hambre y votantes desencantados
puede estallar la
revolución
que lleve a esta
casta a una incómoda situación.