20 de septiembre de 2006

LOS CACAENTES: 14. Los clonicales se han hecho musicales



He aquí la situación de la acción

Nuestra pareja de clonicales
se encuentra en una casa de putas, en un burdel
para establecer relaciones genitales,
con las personas placenteras que hay en el.

y comienza el espectáculo musical
 


¡Que belludo eres, negro zumbón!


Exclama la clónica con gran admiración,
y dice, cantando a continuación:

Primero… el “Cuéntame”
 


"Cuentamé, como te ha ido
en tu caminar por este mundo terrenal
y relatamé, de donde has venido,
pues veo en ti algo muy especial.
Cuentamé, si algo has escuchado
algo sobre lo paranormal,
cuentamé, como te ha ido
y si has conocido algo sobrenatural."


A la vez que estas palabras al negro decía
con su profunda mirada, le seducía.

Reacción musical del morenito
 


El negro quedose perplejo
no entendiendo palabras tan oscuras,
aunque le recordaban una canción
que había escuchado en más de una ocasión;
pero respondió sin complejo
rememorando su vida muy dura:

Segundo… “la canción del Cola-Cao”
 


"Yo soy aquel negrito
del África tropical
que aquí gana un dinerito
que no le viene nada mal
y aunque tengo que hacer servicios,
servicios de semental
prefiero este trabajito
a morir de hambre en el Senegal.
Tengo el color,
el color del Cola-Cao
y de cierto asunto
siempre ando muy sobrao,
algo exagerao, exagerao.
Trabajo con furor
si me dan pasta
si nó, mi pundohonor
enseguida me dice ¡basta!
Pero contigo, muñequita
voy a hacer una excepción
pues tienes una miradita
que me induce a un revolcón."

Veamos como se desenvuelve el gemelo
 


Y mientras tal escena en una alcoba acontecía
en otra similar lo que sigue así ocurría:
El mancebo, al encontrarse con tal bombón
se ha sonrojado de satisfacción
y ha comenzado la conversación

La muchacha del amor no pierde el tiempo
 


La Cielito a nuestro clónico ha engatusado
y de manera cariñosa así le ha hablado:


La profundidad de tu mirada
me tiene un tanto hechizada.
Dime tu, chico turbador
que servicio te viene mejor,
que yo te lo haré muy gustosa
y disfrutarás de esta velada dichosa.

y sigue la música
 


La criatura, un tanto emocionada,
cantando, ha soltado esta parrafada:

Tercero… “Cielito lindo”
 


"Esos genes que tu tienes, Cielito lindo, en tu interior
no se lo des a nadie, Cielito lindo, los quiero yo.
Ay, ay, ay, ay, hazme el favor
de hacerme un gran servicio, Cielito lindo, de lo mejor.
Ay, ay, ay, ay, hagámoslo sin tardar
pues tengo yo muchas ganas, Cielito lindo, de procrear."

La música con amor,

siempre suena mejor


Y entre melodías y canciones
los susodichos gemelos realizaban sus intenciones;
a sus parejas las tenían obnubiladas,
controladas y entusiasmadas.
Y es que no hay nada mejor para un buen retozón
que acompasarlo con una adecuada canción.

Estos hechos anuncian el fin de esta gesta
 


Y con estas rimas musicales
entre chirigotas y chanzas
finalizan, ¡por ahora! las andanzas
de Cacaentes y Clonicales.

Colofón final
 


Pasó el tiempo y los Clonicales con los humanos se mezclaron.
Después de varias generaciones sus presencias ya no se notaron,
pues sus descendientes, de la diversidad humana se contagiaron
y hasta la raza humana mejoraron.



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